El entorno natural es increíble, con hermosos paisajes de montañas y ríos. me gustó mucho la comida, especialmente los productos ecológicos y caseros. Además, las habitaciones eran cómodas y limpias.

La ubicación era muy lejana y difícil de encontrar, especialmente si se dependía del GPS. Además, el acceso por carretera era complicado, con muchos puertos de montaña y niebla en mi caso, lo cual hizo el viaje incluso más peligroso.

Los anfitriones excelentes, comida casera deliciosa, acceso fácil en coche, rutas y sitios de interés.

No puedo quejarme de la propiedad de ninguna manera.

Nos encantó la ubicación del alojamiento, rodeado de montañas y con vistas espectaculares. Además, la carretera de acceso nos pareció muy pintoresca y disfrutamos mucho del trayecto. La habitación era amplia y cómoda, con vistas preciosas desde la ventana. También destacamos la comida casera, con productos frescos de la finca, y el trato cercano y amable de los dueños. ¡Fue una estancia maravillosa!

La cama sonaba un poco al moverse, pero en general no fue algo que nos molestará demasiado.

La atención impecable de los anfitriones. Mapas hechos a mano para senderismo. Comidas caseras deliciosas. Ubicación preciosa en la montaña. Atención excelente a las mascotas. Desconexión total en plena naturaleza. Información detallada sobre rutas. Experiencia única con las vacas.

Nada, todo fue genial.

Nuestra estancia en Casa Corral - Casas de Aldea fue simplemente maravillosa. Desde que llegamos, nos sentimos como en casa gracias al trato amable y acogedor de los propietarios, Elias y Laura. Las comidas y cenas fueron verdaderos placeres gastronómicos, con platos caseros deliciosos y una atención exquisita. Las habitaciones amplias y en buen estado nos brindaron todo el confort que necesitábamos. Además, el entorno natural de las montañas asturianas fue una delicia para nuestros sentidos. Agradecemos especialmente la dedicación de Laura para asegurarse de que no nos faltara nada durante nuestra estancia. ¡Un abrazo fuerte y hasta la próxima!

Si tuviéramos que mencionar algo, quizás hubiéramos agradecido tener televisores un poco más grandes en las habitaciones. Aunque es solo un detalle menor ante la experiencia general maravillosa que tuvimos en Casa Corral - Casas de Aldea.

Ambiente encantador, cocina deliciosa, servicio atento y personalizado. Lugar perfecto para desconectar y disfrutar de la naturaleza. Recomendado para amantes de la tranquilidad y la buena comida. Volveremos.

Entorno natural maravilloso. Anfitriones amables y hospitalarios. Comida deliciosa con productos ecológicos. Senderos hermosos para explorar. Ambiente acogedor y familiar. Mascotas permitidas y bienvenidas. Estancia cómoda y agradable. Atención y orientación excepcionales.

Nos encantó absolutamente TODO! El trato de los dueños de la casa , la gran calidad de las comidas y el entorno. La estancia es perfecta y los dueños hacen que así sea. Las habitaciones son maravillosas y con un encanto especial. Elías es un perfecto guía que te aconseja las mejores rutas. Sin dudarlo para repetir.

Me sentí genial, no me puedo quejar.

El entorno en plena naturaleza, la ubicación, la comodidad, el silencio, la decoración de la casa. El paisaje hasta llegar allí es espectacular, en medio de la montaña y bien asfaltado. El pueblo es precioso, hemos podido desconectar de todo y disfrutar de las vistas a las montañas. Está genial coger el coche e ir a conocer los pueblos de alrededores y nos queda pendiente hacer las rutas de senderismo que parten del la misma puerta de casa. Elías y Laura son encantadores, los mejores anfitriones, todo lo hacen con cariño y dedicación, haciéndonos sentir como en casa. Nos encantó el detalle de que Elías nos subiera a la montaña en su coche a ver sus vacas. La comida de Laura es increíble, todo casero y hecho con mucho mimo. El pan y la fabada, de lo mejor que hemos probado. Desayuno super bueno y comidas y cenas de 10. La habitación preciosa, todo muy limpio y cuidado, ese toque rústico vintage era muy acogedor. La cama muy cómoda y la conexión WiFi bastante bien. Mención especial al comedor acristalado que hay fuera. Precioso para comer y cenar con esas vistas espectaculares. Sin duda repetiremos, será nuestro destino preferido siempre que vayamos a Asturias. Lo recomendamos al 100%.

Me sentí como acogido en una familia, no he tenido ningún inconveniente.

La atención personalizada de Elias y Laura, siempre pendientes de que no nos falte nada. La comida, espectacular y casera, con productos ecológicos y de la huerta propia.El entorno de montaña mágico, con rutas de senderismo y hermosos paisajes.La limpieza impecable y las instalaciones del hotel y el aparcamiento.

Casi perfecto.

El personal fue amable y atento durante nuestra estancia de 2 noches. La comida, especialmente los cachopos, fue deliciosa. Las medidas de limpieza y desinfección fueron buenas. La ubicación en medio de las montañas permite hacer senderismo. Una experiencia recomendable para desconectar y disfrutar de la tranquilidad.

El entorno natural de Casa Corral es perfecto para descansar y desconectar. Se pueden dar largos paseos y disfrutar de baños en el río. Además, las vistas desde el hotel son espectaculares y los paisajes son maravillosos.

Hay bastantes moscas en algunas zonas del campo, lo cual puede resultar molesto para algunos huéspedes.

Mi estancia en Casa Corral fue una experiencia maravillosa. Pasamos una semana allí y quedamos encantados. La comida casera con productos de la finca fue deliciosa y nos hicieron sentir como en casa. El trato de Laura y Elías fue excepcional, nos trataron como si nos conocieran de toda la vida. La ubicación del hotel es perfecta para desconectar y disfrutar del entorno natural. Las montañas, el parque eólico y los caminos forestales nos enamoraron por completo. La habitación era amplia, cómoda y con unas vistas preciosas. agradecimos la limpieza diaria. En definitiva, si volvemos por la zona, sin duda nos alojaremos de nuevo en Casa Corral.

Por supuesto que lo recomiendo.

El lugar es muy tranquilo y encantador, ideal para desconectar. Las rutas de senderismo son cortas pero de gran belleza, bien indicadas. Las habitaciones son geniales y el trato de Laura y Elías es excepcional, te hacen sentir como en casa. La comida es casera y deliciosa, con productos cultivados y de crianza propia. Además, se permite llevar mascotas sin ningún problema.

La ubicación puede dificultar el acceso a otros lugares de interés en Asturias, debido a la distancia y la cantidad de curvas en el camino.